Observada por Ugo Falena, director artístico de la productora Film d'Arte Italiana, recibió la primera oferta para trabajar en el cine mudo.
Su primer film fue Beatrice Cenci (1910), pero no obtuvo un papel de importancia hasta dos años más tarde con Cesare Borgia.
En dicha ciudad conoció a Nino Oxilia, que la dirigió en muchas de sus películas, y con el cual mantuvo una relación sentimental.
En esos años Jacobini también rodó algunas cintas en Italia, como por ejemplo La bocca chiusa (1925) y Beatrice Cenci (1926).
Finalmente, en 1929 rodó en Francia la última película muda de su carrera, Maman Colibrì.