La costa era un lugar de arrecifes donde tomaban baños los habaneros y los pescadores anclaban sus embarcaciones.En este lugar existían viviendas, tabernas situadas entre la mar y el muro en el que los visitantes disfrutaban el ocaso.Ya finalizando el siglo XIX, la Isla era la última colonia española en América, los productos americanos se apoderaban de La Habana.La ciudad era una urbe que demandaba cambios en su infraestructura por la necesidad de saneamiento lo que propició, entre otras cosas, el avance del Malecón… A mediado del siglo XIX, los ferrocarriles cobran vida por el crecimiento acelerado de la metrópoli.El malecón habanero, desde su construcción se ha convertido en signo de la isla, identificándola en cualquier parte del mundo.