El Vedado es el nombre por el cual se le conoce a la "Zona comercial" de la ciudad de La Habana cuya construcción se inició a mediados del siglo XIX y alcanzó su máximo esplendor en la primera mitad del siglo XX.
En cuanto a actividades culturales es solo comparable con La Habana Vieja, con numerosas galerías de arte y museos.
Según la costumbre, todas estaban dispuestas a lo largo del camino por donde circulaba el tranvía tirado por caballos.
Se introdujo por primera vez en el país el uso racional de letras y números para las calles.
A comienzos de la República, en 1902, El Vedado contaba con 1162 viviendas y unos 10 000 habitantes, según datos recopilados durante el censo realizado por los intervencionistas estadounidenses en 1899.
Esto fue aprovechado por grandes compañías inmobiliarias cubanas y extranjeras para comenzar a levantar numerosos edificios altos de entre 20 y 30 pisos, como el Edificio Focsa, el Habana Libre o el Someillán, conjuntamente con varios casinos como el Sans Souci o el Riviera.
Entre la escasa actividad constructiva del Periodo revolucionario destacan Coppelia, la heladería más famosa de Cuba y varios restaurantes como El Cochinito o El Mandarín.
Luego del colapso de la URSS en la zona aledaña al Malecón habanero, se construyeron algunos altos edificios y hoteles como el Atlantic.
Otro punto importante del Vedado es La Rampa, nombre que asume la calle 23 desde la esquina de L hacia el norte hasta el Malecón.
En este barrio también podrás visitar la simbólica heladería Coppelia, caracterizada por tener los mejores helados de la ciudad.
El parque Metropolitano, está en el extremo oeste del barrio siendo un sitio de esparcimiento y recreación.