Música clásica en Ecuador

Los coros estaban generalmente conformados por hombres y en caso de las parte más altas del registro lo cantaban niños.

Destaca sin embargo Agustín Baldeón quien viviría entre 1810 y 1847 por ser el primer violinista en la etapa republicana de Ecuador.

En estos años el compositor Carlos Amable Ortiz haría los primeros pasillos, género que después se convertiría en el característico de Ecuador.

Esto se sumaría a los "Estudios sobre el Montuvio y su Música" realizado por Manuel J. Álvarez, un trabajo pionero en la musicología del litoral ecuatoriano.

Por su parte, Modesto Chávez no solamente destacaría rescatando la música del litoral sino también sería un importante historiador y gestor cultural.

Las primeras composiciones se harían durante el siglo XIX, destacando el pasillo "Reír llorando" de Carlos Amable Ortiz.

Traversari por su parte haría importantes composiciones como Los funerales del sol o la Suite Sinfónica Glorias Andinas.

A esto se sumaría Segundo Luis Moreno, quien siendo un compositor muy prolífico dejaría una lista grande de temas, algunos aún por estrenar.

Se enfocaría en himnos, haciendo composiciones importantes como "Patria tierra sagrada", en el contexto de la revolución liberal.

A esto se suma Angel Honorio Jiménez quien sería autor de varios pasillos, pasodobles, danzas ecuatorianas entre otras composiciones con fines populares.

Después destacaría Julio Bueno, quien sería uno de los pioneros en el estudio y composición con géneros musicales del litoral.

Y la Obertura-Sinfonía "Raymi" - obra innovadora que rompe barreras convencionales, incorporando elementos de percusión corporal.

El primero sería director en varios países, incluyendo Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Estados Unidos, Estonia, Islandia, México, Rusia y Venezuela.

Por último dentro de los instrumentistas más destacados se encuentra el violinista Jorge Saade, el percusionista Cristian Orozco y el pianista Juan Carlos Escudero.

Fotografía del Teatro Nacional Sucre , en la ciudad de Quito, a finales del siglo XIX.
Pedro Pablo Traversari y su orquesta sinfónica