La protección fue establecida mediante la ley provincial n.º 7307, —renumerada posteriormente 729-L— del año 2002, con el objetivo de preservar las singularidades del paisaje y evitar el incremento de la ocupación y los asentamientos.
[2] La zona es un importante yacimiento paleontológico que aún no ha sido estudiado en su totalidad.
[4] Las especies vegetales adaptadas a la aridez de los suelos son cactáceas como la boa de indio (Tephrocactus aoracanthus) y la tuna (Opuntia sulphurea), arbustos como las jarillas hembra (Larrea divaricata), macho (Larrea cuneifolia), retamos (Bulnesia retama) y algarrobos (Prosopis alba), (prosopis nigra).
[7] La fauna de Loma de las Tapias incluye roedores como los cuises (Microcavia australis) y los tuco-tucos (Ctenomys), lagartos (Liolaemus) y ofidios como la yarará ñata (Bothrops ammodytoides).
[8] Se han observado ejemplares de cóndor andino (Vultur gryphus), chimango (Milvago chimango), carancho (Caracara plancus), halconcito colorado (Falco sparverius) y catita serrana chica (Psilopsiagon aurifrons).