Materialmente consisten en 223 planchas circulares de plomo de unos 10 cm (formando 21 libros) grabadas con dibujos indescifrables y textos en latín y en extraños caracteres árabes, que se dieron en llamar salomónicos.Fueron interpretados como el quinto evangelio que habría sido revelado por la Virgen en árabe para ser divulgado en España.Ya en esa época, Luis Tribaldos de Toledo los consideró falsificaciones, pero el arzobispo Pedro Vaca de Castro promovió en su época distintas traducciones que aumentaron la confusión hasta que en 1682 fueron declarados falsos y heréticos por el papa Inocencio XI, pero sí se mantuvo la validez de las reliquias que aparecieron junto a los libros;[2] estos fueron llevados a Roma, donde permanecieron hasta el año 2000, en que fueron devueltos a la Archidiócesis de Granada.[3] Según Henry Kamen, el fraude fue perpetrado "por dos prominentes moriscos, Miguel de Luna y Alonso Castillo, que trataban con ello de sincretizar la cultura islámica con la fe cristiana.[1] Según Julio Caro Baroja, "en el famoso asunto de los plomos del Sacro Monte intervinieron moriscos conocedores del idioma árabe, que demostraban tener unas fuertes convicciones cristianas, al menos exteriormente, y los escritos apócrifos que componen el núcleo central de la falsificación parecen responder —en parte— a un intento de aproximar ciertos elementos de la tradición islámica a la fe cristiana".
Reproducción a buril de uno de los libros plúmbeos grabado por
Francisco Heylan
, 1624.
Diego Nicolás Heredia Barnuevo
,
Mystico ramillete historico, chronologyco, panegyrico, ... del Ambrosio de Granada ... el Illmo. y V.Sr. Don Pedro de Castro, Vaca y Quiñones ... Arzobispo de Granada, y Sevilla, y Fundador Magnifico de la Insigne Iglesia Colegial del Sacro Monte Illipulitano
. Impreso en Granada en la Imprenta Real, 1741.