Lex Publilia Voleronis
Según su proyecto, las tierras recientemente conquistadas se repartirían entre los aliados latinos y los plebeyos para que no cayeran en el dominio público (ager publicus), monopolizado por los patricios.[2] Estos últimos se opusieron firmemente al proyecto de ley y consiguieron que Espurio Casio [3] fuera ejecutado tan pronto como dejó el cargo con el pretexto de que buscaba, por su actitud favorable hacia los plebeyos, conseguir el apoyo suficiente para convertirse en rey.Los cónsules intentaron levantar el ejército para evitar una insurrección de la plebe, pero estallaron disturbios.[11] Fue durante estos disturbios que Publilio Volerón se distinguió, convirtiéndose en un héroe a los ojos de la plebe.[17] Publilio Volerón fue reelegido al año siguiente para completar su proyecto, con Cayo Letorio como su colega.[18] Como reacción, los patricios hicieron que Apio Claudio Craso fuera elegido cónsul para ese mismo año,[18] por su temperamento violento e intransigente [16] y en recuerdo de la hostilidad que su padre había mostrado hacia la plebe.[15] Claudio se opone físicamente al proceso de votación, apoyado por jóvenes patricios.En efecto, como los tribunales ya no eran elegidos por los comicios curados, presididos por el pontifex maximus y con la autorización previa del Senado, los tribunales electos perdieron legitimidad desde el punto de vista religioso y jurídico.