Al principio, el enfoque del canal se basaba en atracciones musicales nacionales e internacionales.[4] El canal, en ese tiempo, se caracterizaba por su amplia programación extranjera, aunque también denotaba su inexistente producción nacional, debido a que no se contaba con infraestructura propia, como el resto de canales en ese tiempo.Sin embargo, el programa en sus últimos años adoptó una línea editorial pro-gobierno y perdió credibilidad por retratar negativamente a los opositores del fujimorismo.En el año 1989 el canal adquiere un local más grande en una casona en el distrito de Jesús María para albergar las nuevas instalaciones.[5] Eventualmente, las instalaciones se reconstruyen y modernizan convirtiéndose en los estudios que funcionan hasta la actualidad.Debido a este convenio, varios programas de televisión producidos por el canal localmente fueron puestos al aire, y algunos de los actores y actrices que participaron en estas saltaron a la fama en la televisión latinoamericana.Los hermanos Mendel y Samuel Winter (accionistas minoritarios) habían tomado el canal, debido a que Baruch perdió su nacionalidad de manera ilegal.[9] Los hermanos Winter serían posteriormente arrestados en 2001,[10][11] aunque acogieron a la colaboración eficaz en ese año.[15] Además que el secretario ejecutivo del Consejo Nacional de Derechos Humanos, Luis Salgado renunciara por discrepancias por el gobierno.[16] Entre 2001 y 2002, el canal entró en reestructuración cuyo director periodístico asumió Gilberto Hume.[17] Beto Ortiz tuvo presencia en los programas Dios nos libre y Vidas secretas, en donde evidenció datos muy duros sobre figuras de la televisión, incluso del mismo canal.Algunos afectados fueron Gisela Valcárcel, Ernesto Pimentel, Almendra Gomelsky (en La vida secreta de Mónica Santa María Smith).Posteriormente, en 2003, su franja horaria estelar logró posicionarse entre las más sintonizadas del panorama televisivo.También se destaca el programa Siempre Gisela, considerado uno de los mayores fracasos televisivos del canal.La gestión del gerente causó fuertes polémicas en todos los ámbitos relacionados con Frecuencia Latina y a sí mismo.El gerente arremetió nuevamente, esta vez contra el programa El especial del humor, protagonizado por Carlos Álvarez y Jorge Benavides.En consecuencia ante tales presiones, los cómicos decidieron terminar la temporada 2010 y no renovar contrato con el canal.En 2018, Latina transmitió la Copa Mundial de Fútbol 2018 al nivel nacional por señal abierta.Ese mismo año, comenzó a emitir el programa Caso cerrado, previamente transmitido por ATV.[37][38] Más tarde, Latina cede los derechos de las novelas turcas a ATV.En 2022, Latina transmitió la Copa Mundial de Fútbol 2022 (Qatar 2022/Catar 2022) al nivel nacional por señal abierta.Max Iglesias, gerente comercial del canal, afirmó que Latina se centró en generar contenido para todo tipo de audiencias, lo que habría sido importante para duplicar la cantidad de espectadores en un año.[46] Durante este año, la empresa cesó a 20 empleados que formaron un sindicato laboral.El principal argumento que se usó para respaldar esta postura hacia tales programas fue que la emisora se limitaba a emitir farándula y temas relacionados con este género de manera amarillista, como los cotilleos, rumores, líos amorosos e infidelidades de celebridades del canal.En 2018, Osiptel multó al canal por práctica colusoria vertical a favor de DirecTV.[51] El presentador del canal para ese mundial Coki Gonzáles justificó que «ahora es mucho más caro comprar los derechos de televisión».En 2003 empezaron a transmitir su programación en 640 x 480p usando el complemento Windows Media Player.En 2016 se cambió a HTML5 para mayor nitidez de imagen y audio en la señal.