La huida (película de 1972)
La huida (título original: The Getaway) es una película de acción realizada en Estados Unidos.Doc se encuentra con Beynon en una reunión previamente acordada en su casa, sin saber que había un acuerdo para traicionarle, Carol se colaría silenciosamente en la reunión y mataría a Doc; pero Carol cambia de opinión, apunta con su arma a Beynon y lo mata.Doc, es mal tratado por Beynon antes del disparo mortal de Carol, descubre que Carol era su amante, que tuvo relaciones sexuales con Beynon para asegurar su libertad condicional, entonces enfadado, recoge el dinero en el maletín y tras una amarga discusión con Carol, la pareja huye hacia la frontera de El Paso.Rudy se recupera del ataque, roba un coche, conduce por la carretera y llega a una casa donde trabaja un veterinario, obliga al veterinario rural Harold y su esposa Fran a tratar sus heridas de bala, luego los secuestra para perseguir a Doc y Carol por la carretera al sur; el hermano de Beynon, un estafador de la región llamado Cully y sus matones también persiguen a Doc McCoy para robar el dinero del maletín.Doc regresa a la estación de trenes donde Carol lo esperaba, con el maletín del dinero recuperado porque la quiere a pesar de todo, compra un coche usado rápidamente y ahora los McCoy escapan por la carretera, se dirigen a una tienda de electrónica en un pueblo pequeño camino a México, donde Doc compra una radio portátil para escuchar las transmisiones de la policía, entonces desesperado apaga el radio cerca del escritorio del propietario y transmite las noticias del robo al banco, los asesinatos y todos los incidentes anteriores donde ellos estuvieron involucrados.Le pide a Carol vestirse rápidamente para poder escapar juntos del hotel.Con la policía en camino para recuperar el dinero robado, la pareja secuestra una camioneta y obliga al conductor, un viejo vaquero cooperativo rural, a llevarles como pasajeros hasta México.La censura cinematográfica del franquismo se ocupó de suprimir la escena final para evitar que ningún crimen quedase sin castigo.