Kitty Genovese

[2]​ Dos semanas después del asesinato, The New York Times publicó un artículo afirmando erróneamente que 38 testigos vieron u oyeron el ataque, y que ninguno de ellos llamó a la policía ni acudió en su ayuda.

[3]​ Sin embargo, desde entonces investigadores han descubierto importantes imprecisiones en el artículo de The New York Times.

Winston Moseley se le acercó, corrió hacia ella y rápidamente la apuñaló dos veces en la espalda.

Las grabaciones de las primeras llamadas a la policía son confusas y ésta no les dio una alta prioridad.

Algunos minutos después del ataque final, un testigo, Karl Ross, llamó a la policía.

Tras su asesinato, Kitty Genovese fue enterrada en el sepulcro familiar en New Canaan, Connecticut.

Winston Moseley (1935-2006), un afroestadounidense maquinista de profesión, casado y con tres hijos, fue detenido más tarde en relación con un robo, no sólo confesó el asesinato de Kitty Genovese, sino otros dos asesinatos, ambos con ataques sexuales.

Moseley dio una descripción a la policía donde detalló el ataque, corroborando la evidencia física en la escena.

La sentencia inicial de muerte fue reducida a una indeterminada entre 20 años o prisión perpetua en 1967.

El artículo llevaba por titular “38 personas que vieron un asesinato y no llamaron a la policía”, la opinión pública acerca de la historia se cristalizó a partir de una cita del artículo de un vecino anónimo que vio parte del ataque pero decidió no llamar a la policía porque “no quería verme implicado”.

Sin embargo el número de los “30 vecinos que no hicieron nada” es engañoso.

La mayoría sólo oyó partes del incidente sin darse cuenta de que era algo serio y nadie vio la violación y ataque final en el vestíbulo que provocó la muerte de Genovese.

Winston Moseley, el 1 de abril de 1964.