No se sabe con certeza si Sardetti y Don Francisco se habían puesto en acuerdo, pero Sardetti negó la deuda y Moreira fue castigado con 48 horas de cepo, acusado de reclamar lo que no era suyo.Cumplió su promesa en un duelo a cuchillo en el propio almacén de Sardetti y a su regreso tuvo que pelear en su rancho contra Don Francisco y cuatro soldados que estaban allí para aprehenderlo.Moreira tenía sólo un caballo bayo, un pequeño perro llamado "Cacique", un poncho, un enorme facón que le fuera obsequiado por Adolfo Alsina (cuya hoja mide 63 cm y cuenta con un peculiar gavilán en U que él mismo hizo reemplazar por el original en forma de S para que parase mejor los hachazos de sus adversarios) y dos trabucos.Las malas lenguas afirman que se tornó pendenciero, provocador e incluso ladrón, aunque no hay pruebas fehacientes al respecto de tales acusaciones.Juan Moreira peleó con todas sus fuerzas, pero justo cuando estaba a punto de saltar la pared que se interponía entre los policías y su caballo fue herido por la bayoneta del sargento Chirino, quien le perforó el pulmón izquierdo.Sin embargo, se pueden apreciar algunos efectos personales, como dagas, y también su cráneo, en el Museo Juan Domingo Perón, sito en la misma ciudad.
El expediente penal contra Juan Moreira, iniciado en 1869 y concluido en 1879, en custodia del Archivo Histórico de la provincia de Buenos Aires.