Nació en Sevilla, hijo del militar Antonio Moscoso Cordón y María Josefa López de Osuna.
Concluida la carrera literaria, vivió algún tiempo en Cuevas (Málaga), fijando posteriormente su residencia en Granada, donde abrió un exitoso bufete de abogados.
[7] Posteriormente se trasladó al Norte y ejerció de Ministro Togado del Consejo Supremo carlista.
[8] Según la necrología publicada por el diario El Correo Español, Juan Manuel Moscoso era un hombre muy espiritual y consultaba continuamente el libro Imitación de Cristo del agustino Tomás de Kempis.
Debido a la simpatía que despertaba en Granada, asistieron a su entierro numerosas personalidades religiosas, aristocráticas, académicas y políticas de diferentes signos ideológicos.