Juan II de Brabante

Este concierto matrimonial se inscribía en un conjunto de alianzas ideado por Eduardo para disponer de apoyos en su enfrentamiento con el rey de Francia, Felipe IV el Hermoso.

Desde el primer momento hubo de hacer frente además a revueltas internas y tumultos en las ciudades, promovidos por los grupos burgueses enriquecidos con la industria y el comercio pañero, que reclamaban acabar con los privilegios del patriciado urbano.

[2]​ Amberes, Malinas, Bolduque, Lovaina y por último Bruselas en 1306 se amotinaron sucesivamente y momentáneamente lograron expulsar de ellas a los patricios.

Sometidas las ciudades se desencadenó una ola de persecuciones contra los judíos, protegidos por el duque que percibía sus impuestos.

[3]​ Agobiado por las deudas y gravemente enfermo del mal de piedra, en 1312 convocó en Kortenberg a la nobleza y los representantes de las ciudades, en las que persistían las muestras de descontento.