De regreso al Perú, se convirtió en partidario del general Andrés A. Caceres.
Resultó levemente herido en estos combates y ascendió al grado de capitán.
[1][2] En 1884, ya con el grado de sargento mayor, pasó a ser ayudante del general Andrés A. Cáceres, que por entonces iniciaba una revolución contra el presidente Miguel Iglesias.
[1][2][3] Instalado un gobierno de transición, fue nuevamente acreditado en Bolivia como adjunto militar en la legación peruana.
Fue ascendido a coronel y posteriormente fue incorporado al Estado Mayor General del Ejército.
Ese mismo año, en plena tensión con Bolivia, fue enviado a la frontera con dicho país; el conflicto se resolvió pacíficamente con la firma del Tratado Polo-Bustamante.
Aunque ambos lograron evitar la moción de censura, el gabinete ministerial en pleno presentó su renuncia.
[6] Durante el gobierno de Guillermo Billinghurst (1912-1914) fue requerida constantemente su opinión en temas militares.
[1] Aunque iniciado en el Partido Constitucional o cacerista, se hizo partidario de Augusto Leguía.
[10] Finalizada la labor constituyente de la Asamblea Nacional, esta pasó a ser congreso ordinario.