Jacopo Piccinino

Nacido en Perugia en 1423, fue hijo del afamado condottiero Niccolò Piccinino y de Gabriella Sestio; algunos autores afirman que su madre murió asesinada por su padre por sospechas de infidelidad.

La ocasión se presentó cuando en el verano de 1458 murieron el rey de Nápoles y el papa Calixto III y Piccinino ocupó Assisi, Gualdo, Bevagna y Nocera, que en otro tiempo habían sido de su padre, aunque la aventura duró poco pues cinco meses después hubo de abandonarlas ante el compacto frente compuesto por la Liga itálica, en especial Pío II y Ferrante I.

En agosto de 1464 viajó a Milán para completar el matrimonio, y en abril del año siguiente Francesco Sforza le convenció para viajar a Nápoles y reconciliarse con el rey.

Al llegar a Nápoles el rey Ferrante le acogió honorable y amistosamente, pero veinte días después le mandó arrestar junto a su hijo Francesco, su secretario Alvise Terzaghi, su canciller Brocardo da Persico y el hijo de este último, acusados todos de estar planeando una conspiración contra el reino, y les recluyó en el Castel Nuovo mientras las tropas del duque de Calabria Alfonso d'Aragona atacaban a las de Piccinino en Sulmona.

Entre sus contemporáneos y entre los historiadores varios siglos posteriores se dio por hecho que la muerte de Piccinino había sido un asesinato premeditado, y se conjeturó que la acusación contra él era una invención del rey Ferrante, y que este se había concertado con el duque Sforza para entre los dos librarse de un condottiero demasiado poderoso y peligroso para la estabilidad de Italia.

Italia en 1454.
Castel Nuovo de Nápoles.