Isla de Lobos (Río Negro, Uruguay)

En condiciones muy propicias y sin enemigos naturales, los animales se propagaron rápidamente originando el actual rodeo uruguayo de exportación.

La isla tuvo también un importante rol en la fundación de Villa Soriano, el primer asentamiento civil europeo en Uruguay.

Los bañados (CONEAT 03.11)[4]​ a lo largo del Río Uruguay son tierras bajas con un albardón costero que es superado por las crecientes y luego retiene las aguas.

La isla es el extremo de la gran cuenca del Río Negro que divide el Uruguay en toda su extensión.

Otros árboles en la primera línea contra el agua son los Sauces criollos (Salix humboltiana) y Espinillos (Acacia caven).

A medida que el terreno sube suavemente hacia el interior, árboles y arbustos están más espaciados sobre un tapiz siempre verde (monte parque).

[5]​ El área de humedal presenta asociaciones herbáceas de plantas heliófilas como la Paja mansa (Panicum prionitis) o la Paja brava (Cortaderia sellowiana) con plantas más bajas como la verbena (Senecio bonariensis) o juncos (Tipha angustifolia) en las aguas bajas.

Pequeños mamíferos, roedores, reptiles, insectos, arácnidos y crustáceos prosperan en el humedal conformando un ecosistema completo.

La confluencia con el Río Uruguay es un pasaje obligado para especies migratorias de gran tamaño como Surubí (Pseudoplatystuma corruscans), Dorado (Salminus brasiliensis), Tararira arco iris (Hoplias lacerdae), Sábalo (Prochilodus lineatus) y Boga (Leposinus obtusidens), todas muy buscadas por los pescadores deportivos.

Los territorios al este del río Uruguay (la Banda Oriental) tuvieron escasa presencia europea hasta el siglo XVII.

El Rey no siguió su consejo pero en 1610 otorgó a Hernandarias dos islas sobre el Río Negro como recompensa por sus servicios: las actuales Isla de Lobos y Vizcaíno.

Más tarde el lugar recibió la población trasladada desde la reducción Chaná-Charrúa Santo Domingo Soriano, fundada en 1664 en la otra margen del Río Uruguay.

Barcos de poco calado transportaban viajeros hasta la Boca del Yaguarí donde esperaban por las embarcaciones mayores que hacían la carrera Salto-Buenos Aires.

Los humedales se mantienen como reserva natural, lo mismo que el monte nativo en las costas, con raleo selectivo para dar sombra y abrigo.

[18]​ La navegación deportiva en los ríos Negro y Uruguay tiene lugar durante todo el año pero es especialmente popular en verano.

También son frecuentes las travesías en canoa o kayak, lo mismo que los simples paseos con guías locales.

Regularmente se organizan excursiones de pesca y hay guías locales especializados en Villa Soriano.

Fragmento de mapa de las Provincias Paraguayas publicado por Matthäus Seutter (1740) donde aparece Isla de Lobos y Santo Domingo Soriano. [ 12 ]
Veleros fondeados en Boca Falsa frente a la playa sur de Isla de Lobos