Lo más probable es que su construcción date del siglo XII, puesto que su torre, declarada monumento nacional en 1931 y situada al sur del edificio, tiene todas las características de ser un campanario mudéjar de aquella época.
A finales del siglo XX se han ejecutado intervenciones destacadas, siendo la principal la realizada en 1983.
Así mismo destaca la bella armadura mudéjar que cubre la nave central y la bóveda gótica del ábside.
La torre fue transformada en el siglo XIV, cuando se cambió la cubierta, que posteriormente fue sustituida por el chapitel.
La principal es una bella portada barroca labrada en el siglo XVIII por Luis Salvador Carmona en donde aparece la imagen de San Nicolás en un relieve.