Iglesia Prioral de San Pedro

Su construcción se empezó en 1512 e inaugurada en 1569, obra del arquitecto maestro Benet Otger de Lyon.

Al inicio del siglo XV se cambió la advocación, el titular dejaría de ser Santa María para pasar a ser San Pedro.

Pasado el conflicto, en 1941 se hizo una restauración importante a cargo del arquitecto César Martinell.

Existen cuatro vidrieras en los muros laterales y siete en el ábside, todas ellas góticas.

En el cuerpo superior se sitúa un gran rosetón, que completa la iluminación interior.

Tiene dos puertas con dintel flanqueadas por pilastras, con entablamento y frontón circular, donde se dibujan las insignias papales.

También llamada de los Tamarit, está situada en la parte derecha mirando al presbiterio.

Exterior de la Prioral.
Exterior de la Capilla del Santísimo.