Actualmente, el llamado Montículo 22, una huaca más pequeña situada al sur, conserva el antiguo nombre "Aramburú".
Una plataforma pequeña adosada al cuerpo principal de esta pirámide por el lado sur fue cortada en 1924 para dar paso a la avenida del Progreso (hoy Venezuela), que une Lima y Callao, y que lo separa de la Huaca 22.
En ella se han encontrado diversos ceramios, fardos funerarios, tejidos, ofrendas (como el spondylus) y quipus.
Este ha sido dividido en dos fases una temprana conocida como playa Grande o interlocking donde el diseño básico es entrelazado configurando peces de cabeza triangular y la segunda, más tardía, recibió el nombre de Maranga o Cajamarquilla, donde el diseño es de trazos geométricos simple con una pasta anaranjada y fina (estilo Nievería), esta última con componentes foráneos relacionados con la costa y sierra del sur (Lumbreras 1974).
Los entierros en la cultura Lima son de cuerpo extendido y sobre literas o el suelo mismo.
Durante los periodos del Intermedio Temprano (450-550 d. C.), Horizonte Medio 1 y 2, (550-750 d. C.) se hizo la ocupación de la huaca San Marcos.
Esta lamentable desaparición de los montículos fue principalmente por la urbanización y el poco cuidados que se le otorgó.
La Huaca San Marcos, al igual que otros monumentos arqueológicos, ha sido víctima del deterioro por culpa de diversos factores.
Con la construcción del Hospital Naval se destruyo y recortó la plataforma oeste de la huaca.