Entre los cerros de Campoy y Lima, se halla situada a 220 m s. n. m. en la margen derecha del río Rímac, y está rodeado por lomas o estribaciones andinas, que enverdecen durante el invierno (de junio a septiembre).
Cerca se hallan otros importantes complejos arqueológicos: Fortaleza de Campoy y cerro Lurigancho.
En ese entonces fue la sede de un curacazgo llamado Lurigancho o Ruricancho, que obedecía al poderoso Señorío Ichma, el cual dominaba los valles del Rímac y Lurín, con Pachacámac como su mayor centro ceremonial.
Otros sitios importantes del curacazgo de Lurigancho eran Canto Chico y Campoy.
Hacia 1470 d. C., se produjo la llegada de los incas, quienes anexaron a los señoríos Ichma y Collique al Tahuantinsuyo.
De otro lado, destacan dos grandes cementerios con tumbas constituidas por cámaras rectangulares, revestidos interiormente con piedra rústicas asentada con barro.
Al lado de la Huaca Mangomarca, se recuperó el parque y los colegios zonales empezaron a usar la zona perimétrica para representar la festividad del Inti Raymi.