Aunque actualmente es aceptada con relativa normalidad, ésta ha sido perseguida duramente durante diversos períodos históricos, tales como bajo la Alemania nazi o la inquisición.[1] Existen numerosos ejemplos de literatura lírica que ensalzan el amor y las relaciones homoeróticas.Ejemplos de poetas con alguna obra que alaban estas relaciones son Catulo, Horacio, Virgilio u Ovidio.[4] En la antigua Roma, si bien algunos autores como Tácito o Suetonio contemplaban la homosexualidad como un signo de degeneración moral e incluso de decadencia cívica, era relativamente frecuente que un hombre penetrara a un esclavo o a un joven, mientras que lo contrario era considerado una desgracia.Al parecer, el rey asiático quedó tan deslumbrado con la belleza del joven mensajero romano que lo invitó a descansar en su habitación y a participar en un festín donde sirvió de copero real durante el banquete.El emperador Nerón fue el primer emperador romano que se casó con otro hombre, un joven eunuco de palacio llamado Esporo y convertido en Sabina por Nerón para reemplazar a su amada y fallecida Popea.Edward Gibbon ya en 1776 confirma que de los doce primeros emperadores solo a Claudio le interesaban exclusivamente las mujeres.Cabe destacar al joven emperador Heliogábalo, conocido por sus numerosos amantes y que a principios del siglo III siendo adolescente escandalizó a sus contemporáneos casándose públicamente dos veces vestido de mujer, adoptando así explícitamente el papel pasivo en la relación.[13] Las mujeres capturadas rara vez eran utilizadas sexualmente, sino más bien eran usadas para pedir rescate.Los piratas conformaron los primeros «matrimonios» o uniones homosexuales de la historia moderna en la institución conocida como matelotage.Los cambios en el código penal surgido de la Revolución, en los que no se menciona la sodomía, se extenderán por toda Europa gracias al emperador Napoleón y serán la base para nuevos códigos penales en los que la homosexualidad ya no es delito.Ya a finales del siglo XIX aparece en Alemania un fuerte movimiento homosexual con epicentro en la ciudad de Berlín (donde incluso se pueden comprar publicaciones gais en los kioscos),.Posteriormente a este período de florecimiento del movimiento homosexual, en diversos países europeos se instalaron regímenes dictatoriales que llevaron en muchos casos a un recrudecimiento de la legislación y las actitudes ante la homosexualidad.El fascismo, así como otras corrientes dictatoriales de similar ideología, tuvieron su punto álgido en Europa durante los años 30.Bajo estas dictaduras, en numerosos casos se otorga a las autoridades eclesiales el control de la moral pública y privada.[20] En España, durante el franquismo, se estima que un total de unas 5.000 personas fueron detenidas por tener un comportamiento gay.[22] Sin embargo, la simpatía inicial hacia las relaciones homosexuales cambió pronto a una condena de las mismas por «antisoviéticas» o «atrasadas», particularmente si implicaban al clero en un Estado que promovía activamente el ateísmo.La excepción fue Rumania, donde se elaboró el Artículo 200 que persiguía las relaciones homosexuales tanto en público como en privado.[cita requerida] A medida que estas dictaduras han ido cayendo, la democracia ha aparecido en toda Europa.Aun así, en Europa se ha legalizado en Países Bajos (2001), Bélgica (2003), España (2005), Noruega (2009), Suecia (2009), Portugal (2010), Islandia (2010), Dinamarca (2012), Francia (2013), Luxemburgo (2015),[28] Reino Unido,[29] Irlanda (2015), Finlandia (2017), Malta (2017), Alemania (2017) y Austria (2019) mientras que en el resto de los estados o está sujeto a debate o no se ve una aprobación cercana.En Italia, los socialdemócratas de Romano Prodi consideraban que el matrimonio igualitario era «muy radical»,[33] aunque posteriormente el primer ministro Matteo Renzi afirmó durante la apertura de la Asamblea Nacional del Partido Demócrata que debía aprobarse el matrimonio entre personas del mismo sexo, para «cerrar una cuestión abierta en Italia desde hace demasiados años y que exige una solución definitiva».[34] Sin embargo, en países como Holanda, Noruega o Suecia los partidos conservadores están a favor y han aprobado en el parlamento leyes de extensión del derecho al matrimonio a parejas del mismo género.[44] En el ámbito institucional (especialmente a nivel estatal y municipal), cabe destacar algunos casos de homofobia que, si bien son condenados por las instituciones europeas, continúan dándose.En España, el primer político que dio a conocer públicamente su homosexualidad fue Miguel Iceta, diputado del PSC, durante las elecciones de 1999.[67] Pero no sólo hay políticos homosexuales en la actualidad: en el pasado, aunque en menor medida que en la actualidad, hubo diferentes personalidades políticas homosexuales, algunas de las cuales ocuparon cargos importantes, como Walther Rathenau (ministro de Asuntos Exteriores alemán en 1922).[69] Bertrand Delanoë, del Partido Socialista, fue alcalde de París (2001-2014); se hizo famoso por ser el primer político francés en declarar su homosexualidad, en una entrevista televisada en 1999.En sus primeras declaraciones, el detenido reconoció que no le gustaban "los políticos y particularmente los gais".En muchas ciudades europeas, el Día del orgullo gay es celebrado con multitudinarias fiestas, manifestaciones y caravanas.
Mapa sobre la situación de la
adopción homoparental
en Europa.
Adopción permitida
Adopción legal de hijastros
Sin reconocimiento o ambiguo
Adopción homoparental prohibida