Su primer trabajo fue un busto de Simón Bolívar tallado en madera, a los cuatro años.
Durante cerca de una década, se convierte en un bienandante del arte y realiza periplos por toda Europa.
Allí realiza varias obras escultóricas como son el mural 'Folclor Llanero' ubicado en las instalaciones del recinto de las Fuerzas Armadas.
Se dedica a la pintura de temas marinos y trabaja con exclusividad para prestigiosas galerías locales.
Desde Miami, se convierte en abanderado defensor y promotor de los valores Colombianos en Los Estados Unidos.
En 1990 regresa nuevamente a Colombia, se instala en Bogotá, y empieza una carrera de Arte Público.
En 1992 dona a Cartagena 'Los Pegasos', dos monumentales corceles alados, ubicados en el muelle del mismo nombre, en la Heroica.
En 1998 realiza un sendero ecológico compuesto por nueve fuentes ornamentales, con los diferentes animales en extinción de las riberas del rio Magdalena sobre cada una, denominado 'Sendero Yuma'.
En este se representan ciervos, chigüiros, dantas, jaguares, cocodrilos, tortugas, garzas, iguanas, y armadillos, el sendero rematando en una plazoleta dedicada al máximo cacique de la región en la época de colonización española, llamado Pipatón, donde es honrado, siguiendo la leyenda, que nunca fue vencido hasta ser su amada asesinada.
Gran sorpresa y admiración despertó la obra en el presidente Hugo Chávez, que en el mismo momento invitó al maestro a que se trasladara a Venezuela, para realizar el monumento más grande de América, para el también más reconocido hombre americano Simón Bolívar.
Los panameños hicieron vigilia por varias noches consecutivas con velas, esperando el regreso de los niños.
Así se dispuso a realizar propuestas para diversos monumentos por todo el país, con ideas para las ciudades de Yopal, Arauca, Bogotá, Jamundí, y propuestas incluso en la Isla de Malpelo, ninguna rindiendo frutos.
En esta misma ciudad falleció el Maestro escultor a los setenta y ocho años en la misma ciudad durante este trabajo, lejos de su familia, a causa de problemas respiratorios e intervención inadecuada.
Su legado artístico es protegido por la fundación 'Perseo Procesos Escultóricos', administrada por el mayor de sus hijos varones.