Para la temporada 1929-30, con diecisiete años, abandonó Gijón definitivamente y fichó por el Sevilla Football Club,[6] que por aquel entonces luchaba por ascender a Primera División.
En sus primeros años en Sevilla tuvo que conformarse con varios títulos menores, como dos campeonatos regionales de Andalucía.
En total, esa temporada el delantero asturiano jugó diecisiete partidos, en los que anotó veintiocho goles, la mitad de los conseguidos por su equipo.
Su buena campaña se vio también recompensada con la llamada del seleccionador español, que lo convocó para el Mundial de 1934.
[6] En la temporada 1939-40, el Sevilla acabó subcampeón; un empate en la última jornada le hizo perder un título que prácticamente tenía asegurado.
En la campaña 1940-41 terminó en quinta posición, aunque la delantera andaluza exhibió su poder realizador al finalizar el campeonato como el equipo más goleador: setenta tantos en veintidós partidos.
A ello contribuyeron resultados como el 11-1 ante el C. F. Barcelona, la mayor goleada de la historia del Sevilla en Primera, en la que Campanal logró con cinco tantos.
El delantero asturiano, que finalizó la temporada como máximo anotador del equipo —diecisiete goles en dieciocho partidos— tuvo otras tardes destacadas, como la tripleta lograda en la victoria por 10-3 ante el Valencia C. F. o dos de los cinco goles que los sevillanos le endosaron al Real Madrid C. F. En la temporada 1941-42 Campanal volvió a ser el máximo anotador de su equipo, con diecisiete tantos en veinticinco partidos.
Campanal tuvo un papel testimonial, ya que participó en cuatro partidos y anotó dos goles, aunque uno de ellos fue decisivo para empatar un encuentro ante el Real Madrid.
Como ya había vivido como jugador, el Club Atlético de Madrid le arrebató el título a los sevillanos en la última jornada del campeonato.