Carretilla elevadora

Una carretilla elevadora, también conocida como grúa horquilla, autoelevador o montacarga,[1]​[2]​ (coloquialmente, toro), (forklift en inglés), es un vehículo contrapesado en su parte trasera que, mediante dos horquillas, se utiliza para subir, bajar y transportar palés, contenedores y otras cargas.

Además, se pueden utilizar las horquillas con distintos aparatos de elevación, como eslingas y poleas.

En 1954, la empresa británica llamada Lansing Bagnall desarrolló la carretilla elevadora moderna tal y como la conocemos hoy en día.

Las ruedas traseras son orientables (directrices) con un gran ángulo de giro para facilitar la maniobrabilidad en espacios angostos.

Su uso requiere una cierta capacitación y los gobiernos de distintos países exigen a los negocios que sus empleados tramiten licencias especiales para su manejo.

[cita requerida] Generalmente, estos vehículos no se pueden utilizar en sitios cerrados (como almacenes y centros de distribución, donde las emisiones deben tenerse en cuenta).

Están equipadas con una gran batería que le proporciona la suficiente autonomía para trabajar durante unas horas y una vez agotada esta la deberemos volver a recargar con un cargador externo o sustituirla por otra que esté previamente cargada (en régimen de funcionamiento continuo).

[11]​ Habitualmente, las carretillas elevadoras siempre disponen de horquillas que se deslizan por el mástil como medio más habitual para coger las cargas introduciendo las horquillas bajo el palé, pero existen otras versiones más específicas para manipular cargas -que por su forma- son difíciles de paletizar o para evitarse ese proceso.

[16]​ En el mercado, existen soluciones para reducir riesgos laborales producidos por atropellos con carretillas elevadoras.

Basado en la estereovisión, un algoritmo analiza en tiempo real si una persona está en una zona ciega de la carretilla elevadora.

El sensor emite un sonido y mide el tiempo que la señal tarda en regresar.

Habitualmente, este tipo de sensores sólo se utilizan para la detección trasera.

La detección es tanto delantera como trasera y discrimina las personas de los obstáculos habituales en los almacenes.

Por este motivo, el conductor solo recibe alerta cuando hay un peatón cerca de la carretilla.

Carretilla elevadora diesel, con capacidad de carga de 2.500 kg.
Carretilla elevadora realizando operaciones de carga aérea.
Una carretilla retráctil con pantógrafo que permite la extensión de las horquillas en pasillos estrechos.
Carretilla para grandes tonelajes.
Sistema de detección de peatones.