Funcionalismo lingüístico

Por ello, la cuestión básica por resolver es verificar cómo se comunican los usuarios de una determinada lengua.Esto implica analizar no solo las formas o estructuras gramaticales, sino también toda la situación comunicativa: el evento, los participantes, el contexto discursivo.Dentro del primero, se analizan estructuras gramaticales tales como los fonemas, morfemas, relaciones sintácticas y semánticas, los constituyentes, las dependencias, etc.Las segundas analizan estos fenómenos y, a la vez, construyen un modelo formal del lenguaje.También se incluyen dentro de esta categoría diversos trabajos de autores como Thomas Givon (Talmy Givón), Susumu Kuno, Michael Silverstein, Anna Siewierska, Sandra Thompson, Robert Van Valin y Anna Wierzbicka.Actualmente, Salvador Gutiérrez Ordóñez y César Hernández Alonso se encuentran, más allá de sus diferencias teóricas, entre los mayores exponentes del funcionalismo español.El teórico que en primer lugar intentó aplicar los principios funcionalistas al ámbito de la morfología fue G. Gougenheim.En la versión más ortodoxa de esta gramática, las categorías gramaticales se definen según las funciones que pueden contraer.Por ejemplo, se considera sustantivo todo elemento que puede desempeñar funciones como sujeto o complemento directo, independientemente de su estructura interna.Alarcos puede ser considerado el primer lingüista del siglo XX en España, pues introduce y consolida el empleo en la lingüística de un modelo teórico explicativo, frente al modelo preponderante en la primera mitad de este siglo en la Península, fundamentalmente descriptivo y basado en la gramática tradicional.Sin embargo, este gramático no se prodigó en presentaciones teóricas de su doctrina gramatical.Su obra más influyente (Alarcos 1970) no es una gramática concebida en su totalidad sino una recopilación de artículos.Por último, la llamada escuela de Santiago, con Guillermo Rojo a la cabeza, se separó desde sus inicios del pensamiento alarquiano más ortodoxo.No es tanto, sin embargo, el reconocimiento internacional, que algunos gramáticos explican por la preponderancia de la lingüística anglosajona hoy en día.
El funcionalismo lingüístico es heredero de las tesis del suizo Ferdinand de Saussure y hunde sus raíces en el estructuralismo
El príncipe, lingüista y fonólogo Nikolái Trubetskói.
Lucien Tesnière. La corriente funcionalista española ha sufrido la influencia de las grandes escuelas funcionalistas europeas, como la francesa, con Lucien Tesnière o André Martinet