Esta última afirmación es ciertamente inexacta, y Estrabón dice expresamente que los marrucinos dominaban la ribera derecha del Avertus hasta su desembocadura, mientras los vestinos poseían la ribera izquierda,[7] por lo que los primeros debieron quedar entre los frentanos y la desembocadura del Aternus.
Sin embargo, la versión de Plinio parece ser más correcta que la de Estrabón y Ptolomeo, pues se sabe que Ortona y Anxanum (actual Lanciano), situada ambas bastante al norte del Sagro, fueron ciudades frentanas.
De hecho, en el 319 a. C., cuando su nombre aparece por primera vez en los registros históricos,[8] aparecen en guerra contra Roma, pero fueron rápidamente derrotados y sometidos,[9] y unos pocos años después (304 a. C.), al final de la segunda guerra samnita, los frentanos son mencionados, junto a los marsos, marrucinos y pelignos, yendo voluntariamente a pedir una alianza con Roma,[10] al que parece que se adherieron subsiguientemente con firmeza.
[12] Durante este periodo parecen haber mantenido relaciones políticas mucho más estrechas con sus vecinos los marrucinos, pelignos y vestinos, que con sus parientes los samnitas.
Su territorio fue atravesado sin resistencia por Julio César en la revuelta de la segunda guerra civil en el 49 a. C.,[19] siendo ésta la última ocasión en la que su nombre aparece en los registros históricos.
Está surcado por numerosos ríos que nacen en las montañas del Samnio y fluyen cruzando la tierra frentana hasta el Adriático.
La costa de esta parte del Adriático presenta pocos accidentes destacables, y ninguna buena bahía natural.
La Antichità Frentane del abad Domenico Romanelli,[21] que era nativo de esta parte de Italia, es un trabajo muy acrítico, pues el autor se dejó extraviar principalmente por las inscripciones y otros documentos recopilados por Polidoro, un anticuario italiano del siglo XVIII, que parece no haber tenido reparos en falsificar sus hallazgos, o al menos corromperlos y alterarlos de forma que se adecuaran a sus fines.
Por otra parte, la Tabula da el nombre de un lugar llamado Pallanum del que no se tiene otra mención, pero cuya ubicación, según Romanelli, está señala por grandes ruinas en un lugar llamado Monte di Pallano, unos 5 km al suroeste de Atessa.
[28] La ciudad de Larinum acuñó monedas en el siglo III a. C. que llevan la leyenda latina «LARINOR(VM)».