Estudió en las universidades de Lérida y Pisa doctorándose in utroque iure en derecho civil y canónico.
En 1498 fue enviado a Florencia para tomar parte en el juicio contra Girolamo Savonarola.
Su cercanía y buena relación con el papa Alejandro VI le llevó a renunciar a la sede de Lérida y a establecer su residencia en la Santa Sede, siendo nombrado gobernador de Roma y arzobispo de Sorrento (Italia); al servicio de este papa reprimió duramente a sus rivales los Colonna y los Orsini.
Con el ascenso de Julio II, a finales de ese mismo año huyó de Roma por temor a las posibles represalias del nuevo papa contra los partidarios de los Borgia, y se refugió en Nápoles.
Dejó escrita una obra jurídica titulada Decisiones.