[5] Tras la disolución de la legislatura y el fin de la regencia escribió con Francisco Cabello y Ramón María Temprado, miembros de la misma candidatura esparterista, una Historia de la guerra última en Aragón y Valencia (primera edición aparecida entre 1845 y 1846) que era, al mismo tiempo, una reivindicación del liberalismo progresista y del papel de la nación en la construcción del liberalismo.
En 1857 volvió a serlo por el distrito de Albarracín, con 137 votos, y por Teruel en enero de 1869 (25653 votos sobre 40546 votantes).
Todavía sería elegido diputado en 1871 y en las primeras Cortes de la Restauración, aunque en ambas ocasiones optó por la plaza de senador.
[11] Tras la Revolución de 1868 se incorporó al Partido Constitucional formado por la fusión de los unionistas y un sector del Partido Progresista liderado por Sagasta, del que nacería el Partido Liberal Fusionista tras la Restauración (aunque él se adhiriera en esa ocasión al Partido Conservador), y todavía en junio de 1874 fue nombrado presidente del Consejo de Estado, donde se mantuvo hasta enero de 1875.
[12] Cerca del final de su carrera política, en 1881, Ángel María Segovia resumía su dilatada y diversa trayectoria: