Nicaragua es una tierra rica en folclore, con múltiples influencias culturales de los diversos pueblos que la conforman, mayormente indígenas, europeos y africanos.
En teatro folclórico destaca la obra El Güegüense (también conocido como Macho Ratón) es un drama satírico y fue la primera obra teatral de la literatura nicaragüense.
El Güegüense es una síntesis de la fusión de las culturas española e indígena que combinan el teatro, la danza y la música, siendo considerada entre las expresiones folclóricas y literarias más distintivas de la época colonial en América Latina.
[1] Fue escrito por el autor anónimo en el siglo XVI, convirtiéndose en una de las más antiguas obras de teatro indígena del Hemisferio Occidental.
[2] El imaginario popular nicaragüense tiene una gran cantidad de mitos y leyendas en todas las regiones del país, entre ellas: En festivales de tipo carnavalesco llenos de danzas bulliciosas y coloridas destacan: