[1] Su familia estaba vinculada al carlismo desde el Sexenio Revolucionario y había ocupado cargos de relevancia en dicha causa.
Por ejemplo, Antonio Pérez de Herrasti y Antillón (1839-1900), tío segundo suyo, había presidido en Granada la junta carlista regional.
[5] Tras la proclamación de la Segunda República Española, fue detenido por haber participado presuntamente en un complot monárquico.
[12] Sin embargo, la mayoría de los tradicionalistas veían el fascismo con recelo y consideraban que el defecto principal del mismo radicaba en lo que Fal Conde calificó como «el socialismo político fascista de "todo para el Estado"».
[14] Durante la guerra civil española formó parte de la Columna Redondo y realizó importantes aportaciones económicas al bando nacional.