Hasta los años 90, el feminismo hegemónico se dirigía a mujeres blancas de clase media, así que el feminismo interseccional trató de introducir en la ecuación realidades mucho más dispares.
[7] Sin embargo, la idea ya estaba presente con anterioridad y sus inicios se remontaban a la opresión de las mujeres negras: en 1974 el Colectivo Combahee River argumentó que la opresión a las mujeres negras implicaba racismo, sexismo y desigualdad entre clases sociales.
Sus inicios se remontan a 1972, cuando el texto de Ann Oakley, Sex, Gender and Society[13] se sitúa como un antecedente relevante para estudios posteriores al establecer una diferenciación entre el género, para hablar de las pautas de comportamiento culturalmente establecidas en el ámbito de lo femenino y lo masculino y a qué se ajusta cada persona, y el sexo, que se refiere a las diferencias fisiológicas entre hombres y mujeres cis.
También en Estados Unidos, Diana Courvant fue la primera en utilizar el término "transfeminismo" durante un evento en la Universidad de Yale.
[15] Ocho años más tarde, esta autora se unió a la activista Emi Koyama para crear la web Trasfeminism.org, cuya finalidad era visibilizar la causa y conocer a otras personas que investigaran acerca de estos temas.