Algunos sistemas incluyen el tamizado de los materiales; su inspección, muestreo y análisis; secado, o precalentado (en el caso del reciclado).
Ambos procesos se inician con la gota en descendiendo por gravedad, guiada a través de alimentadores y tolvas a los pre-moldes de soplado o prensado según el método, cuyas dos mitades están cerradas y se sellan por arriba mediante un separador.
Estos recipientes parcialmente terminados se denominan "parisons", aunque son inmediatamente soplados a continuación para que adquieran su forma final.
En el proceso de compresión y soplado, el "parison" está formado por un émbolo de metal largo que se eleva e impulsa el vidrio hacia afuera para llenar el anillo y los moldes.
Finalmente, las botellas son transportadas a una temperatura controlada para ser sometidas al proceso de recocido.
Estas máquinas controlan y mueven las partes que dan forma a los envases.
Tiene un banco de entre 5 y 20 secciones idénticas, cada una con un sistema completo para fabricar envases.
El enfriamiento desigual causa un vidrio débil debido a tensiones residuales internas.
Sistemas de ordenador recogen la información necesaria para localizar los moldes donde se estén produciendo fallos.
Esto es posible porque cada molde marca con un código de puntos los envases que produce.
Se forman con máquinas automáticas (paletizadores) que disponen y apilan los envases en capas superpuestas separadas por láminas de apoyo.
Esto hace el vidrio resbaladizo, evitando enganchones y paradas en las cintas transportadoras que mueven los envases por la línea de producción.
El invisible recubrimiento combinado resultante proporciona al envase una superficie virtualmente inrayable.
Las fábricas normalmente disponen de varios compresores grandes para proporcionar el aire comprimido necesario.
Las fábricas por tanto funcionan 24 horas al día y 7 días a la semana.
Esto significa que hay poco margen para aumentar o reducir los índices de producción.
Índices de retorno del 95% no son raros en los países nórdicos (Suecia, Noruega, Dinamarca y Finlandia).
Este método da a la hoja de vidrio un grosor notablemente uniforme y superficies muy planas.
Esta situación es agravada porque son negocios ligados a mercados maduros y a menudo han sido localizados en el mismo lugar por periodos de tiempo largos, lo que en muchos casos se traduce en que han quedado enclavadas en suelo residencial debido al crecimiento de las ciudades.
Cómo afecte este ruido al entorno depende fuertemente del diseño de la fábrica.
Muchas fábricas utilizan agua con aceite emulsionado para enfriar y lubricar los mecanismos que manipulan el vidrio fundido.
Algunas fábricas en zonas urbanas con problemas de contaminación del aire particulares los mitigan utilizando oxígeno líquido.
Las materias primas que componen el vidrio son materiales granulares o pulverulentos.