Su objetivo era reunir un ejército en la Jamaica británica conseguir milicias en Mosquitia, llegar al Lago Cocibolca y capturar la ciudad de Granada con dos objetivos: cortar el virreinato de Nueva España en dos y proporcionar a los ingleses un acceso al océano Pacífico.
Debido a la imprevisión británica, los problemas logísticos militares y las enfermedades, la expedición resultó un costosísimo fracaso.
Las operaciones continuaron, haciendo de bogas los soldados que, no acostumbrados a ese ejercicio doblemente penoso en un clima ardiente, sucumbían sin adelantar nada.
Los invasores ingleses habían empleado cerca de dos meses en remontar el río, apoderarse del castillo y hacer sus demás preparativos.
Esto permitió que las autoridades españolas se pusieran en armas y fortificaran la boca del lago de Nicaragua.