Evaristo Manero Mollá

Pronto pudo demostrar su valor y valía cuando la epidemia de fiebre amarilla de Barcelona de 1870 se extendió a Alicante presentándose voluntario en el Ayuntamiento como médico, y en la lucha contra la fiebre amarilla arriesgó su vida llegando a contagiarse él mismo.

Lo hizo junto a los galenos Ildefónso Bergez, Juan Jornet, los hermanos Ausó Arenas, Luis Mauricio Chorro, Remigio Sebastiá, J. Seguí, V.

[1]​ En 1894 participó en la fundación del “Colegio de Médico-Farmacéutico Provincial” que presidió el farmacéutico José Soler con el doctor Federico Fajardo Guardiola de secretario.

En 1903 fue presidente teniendo en la Junta colegial de secretario a Juan Sebastiá Teijeiro, tesorero el dr Gabriel Montesinos y Donday, vocales: el dr José Gadea Pro, Enrique Fdez Grau, el dr Federico Parreño Ballesteros, José Sánchez Santana, Pedro Cabello Francés y de contador Edmundo Ramos Prevés.

[3]​ Tuvo como continuadores en la profesión a sus hijos Carlos y Evaristo Manero Pineda.