Esther Borja
La fama comienza con su interpretación del vals Damisela Encantadora, compuesto especialmente para ella por Lecuona, en la zarzuela Lola Cruz.En 1936, junto a los hermanos Lecuona y a Ignacio Villa ―más conocido como Bola de Nieve― realiza una gira artística por varios países latinoamericanos, incluyendo Argentina, Chile, Perú, Uruguay y Brasil.Nuevamente en Buenos Aires interpreta con gran éxito las zarzuelas 'El Cafetal, Lola Cruz, Las Leandras, Rosa la China, María la O y las operetas La condesa Maritza, La danza de la libélulas y La bayadera.Una cita del compositor Gonzalo Roig permite comprender lo que Esther Borja ha significado para la música cubana:[4] Días después, el 28 de diciembre del mismo año, falleció en la capital cubana.