Escorodita

Fue descubierta en 1818 en minas de los montes Metálicos, en el estado de Sajonia (Alemania),[1]​ siendo nombrada así del griego scorodion que significa "similar al ajo", en alusión a su olor cuando se calienta.Funde con carbón de madera, produciendo un muy característico olor a ajo.Puede presentar un efecto "alejandrita" si se alterna iluminación con luz natural y artificial.Es un mineral secundario relativamente común, que se forma como resultado de la oxidación de la arsenopirita u otras especies minerales conteniendo arsénico.Suele encontrarse asociado a otros minerales como: farmacosiderita, beudantita, carminita, dussertita, arseniosiderita, adamita, austinita, vivianita u óxidos de hierro.