El divino impaciente es una obra de teatro en verso con un prólogo, tres actos y un epílogo, escrita por José María Pemán[1] y estrenada en 1933.
El autor la escribió como respuesta a la disolución legal[2] de la Compañía de Jesús y al laicismo que trataba de instaurarse bajo el nuevo régimen democrático de la Segunda República.
Hasta la década de los sesenta, siguieron haciéndose representaciones tanto en España como en América.
Desde entonces es, salvo algunas representaciones puntuales, una obra poco escenificada.
La obra recrea la vida de San Francisco Javier, comenzando en su estancia en París, donde conoció a San Ignacio de Loyola,[4] y luego la acción continúa en Roma, después en la residencia de los jesuitas y, por último, con su labor misionera en China.