Batalla de Quiberon

Tenía como objetivo estratégico alzar en armas la Francia occidental para acabar con la República Francesa y restaurar la monarquía.

No obstante hacia 1795, a pesar de varios reveses iniciales, los revolucionarios no solo habían conjurado la amenaza externa, sino que estaban en pleno proceso de expansión revolucionaria.

Se decidió equipar a algunos de los exiliados con uniformes británicos, ignorando la animadversión que los bretones sentían hacia los ingleses, e incrementar el número de expedicionarios reclutando prisioneros republicanos de las cárceles inglesas, sin tener en cuenta que su lealtad hacia la causa realista era más que dudosa.

De Puisaye y d’Hervilly no tenían el mismo plan; el primero quería aprovechar el elemento sorpresa y atacar sin dilación en apoyo de las fuerzas realistas de Francia occidental, mientras que d’Hervilly opinaba que los chuanes eran indisciplinados y serían incapaces de tener éxito en una batalla en campo abierto, por lo que pretendía permanecer en Quiberón, fortificarlo y convertirlo en una base desde la que ir recibiendo refuerzos.

Como consecuencia del todo ello, no obstante, se había perdido el elemento sorpresa, y los republicanos comenzaron a reunir tropas para rechazar la invasión.

Los exiliados se impacientaban y no comprendían el motivo del retraso, mientras que para los chuanes, que sospechaban de traición, ello confirmó sus temores y provocó un desastroso efecto en la moral.

Así las cosas, Hoche llegó a Quiberón, recuperó Carnac el 6 de julio y para el 7 había retomado casi toda la península, convirtiéndola en una trampa para los realistas.

La columna no recibió refuerzos y Tinténiac murió en una emboscada el día 17.

Los exiliados, y después los chuanes, se lanzaron al ataque pero fueron repelidos sufriendo más de 1500 muertos, entre ellos d’Hervilly.

Los prisioneros republicanos desertaron y, mediante la traición, entregaron el fuerte a Hoche.

Hoche había prometido verbalmente tratar a los realistas como prisioneros de guerra.

Habían sido capturados 6332 exiliados y chuanes junto con miembros de sus familias.

Victoria de los republicanos franceses en Quiberón el 21 de julio, ( Museo de la Revolución francesa ).