Aunque la constante matemática conocida como π (pi) ha sido estudiada desde la antigüedad, y también el concepto de número irracional, no fue sino hasta el siglo XVIII cuando se probó la irracionalidad de π.
En el siglo XX, se encontraron demostraciones que no requerían un conocimiento más allá del cálculo integral.
Se puede demostrar que π es irracional fácilmente si este es expresable mediante una fracción continua infinita.
[1] Dado que cada fracción continua finita se puede expresar mediante un número racional y viceversa,[1] si π fuera racional, debería existir tal fracción continua.
y la fracción continua tendría un número finito n de términos.