Debate electoral

La televisión y la radio son los dos medios más usados para este propósito, quienes, por lo general, transmiten de manera conjunta en cadena nacional para difundir con la mayor cobertura posible.Estas sociedades dieron paso a una nueva era de debates públicos estructurados y competitivos, como los famosos debates entre Abraham Lincoln y Stephen Douglas en 1858, que no solo contendían por una banca senatorial en Illinois, sino que también atraían la atención nacional por abordar temas críticos como la esclavitud.Entretanto, quienes escucharon el debate por radio prefirieron a Nixon, cuyas dotes de orador eran superiores.Sin embargo, tenemos pocas evidencias para respaldar todas esas afirmaciones frecuentes.En algunas naciones, los debates son regulados por leyes y organizados por instituciones gubernamentales específicas.Estas entidades aseguran que los debates se lleven a cabo de manera equitativa y conforme a regulaciones claras que garantizan la representación y la equidad entre los candidatos.Por otro lado, en países como Estados Unidos, los debates son organizados por entidades cívicas no partidistas, tales como la Comisión de Debates Presidenciales, que opera independientemente de los partidos políticos y del gobierno.Esto refleja una tradición en la que los medios juegan un papel activo en la formación de la opinión pública.Estos formatos pueden variar según el número de candidatos, la moderación periodística, y cómo se involucra a la audiencia.
Foto del último y cuarto debate Kennedy-Nixon que tuvo lugar en Nueva York el 21 de octubre de 1960.
Candidatos presidenciales en el debate para las elecciones brasileñas de 2010 ( José Serra , Dilma Rousseff y Marina Silva ).