[cita requerida] La crème fraîche se obtiene introduciendo leche cruda en una desnatadora.
La nata así obtenida por centrifugación puede dejarse cruda[2][3][4] o ser sometida a un proceso de pasteurización.
Para obtener una nata más espesa, untuosa y acidulada, se inyectan cultivos de lactobacillus en la crema ligera no pasteurizada y se dejan estos últimos desarrollarse hasta que la crema sea ácida y grasa.
La crema fresca existe también bajo una forma más líquida, que se llama a veces crème fleurette.
Existen en el mercado variantes mezclados con diferentes ingredientes, tales como ajo, hierbas aromáticas, etc.[cita requerida] Se emplea a menudo la crème fraîche en la elaboración de sopas, salsas, repostería y postres.