El Provisor del Obispado determinó que la Cofradía podía abandonar el Convento para dirigirse al de la Trinidad teniendo la comunidad de frailes que devolverles las imágenes y demás enseres.Dicha concordia establecía un turno por el cual la Congregación del Santo Sepulcro sacaría la procesión del Entierro los años pares y los años impares lo haría la celebraría la Cofradía de la Soledad.Calvario, atribuido a Sebastián de Solís en 1579,[1] formado por Cristo muerto en la cruz, a ambos lados el Buen ladrón, San Dimas, y el Mal Ladrón, Gestas, y a sus pies el apóstol San Juan y María Santísima del Silencio, talla anónima que no es original de este misterio, donada por los condes de Humanes en 1966.Santo Sepulcro, imagen de Cristo yacente realizada por Juan Abascal Fuentes en 1965,[3] restaurado por María José López de la Casa en 2011, con una urna barroca anónima del siglo XVIII.[1] Paso realizado por Francisco Díaz Roncero en 1959, con palio bordado por Juan Carlos Colmenero Andreu en 1989-1990.