[2] En esencia, los condimentos son ingredientes destinados a intensificar o fortalecer el sabor de los platos.
A menudo fuertes de sabor y por tanto incluidos en pequeñas cantidades, son muy populares.
Los romanos hacían los condimentos garo y liquamen triturando las entrañas de varios pescados y luego fermentándolos en sal, dando como resultado un líquido que contenía ácido glutámico, adecuado para realzar el sabor de los alimentos.
Los condimentos se añaden a veces antes de servir el plato, como por ejemplo los sándwiches que llevan kétchup o mostaza.
Por eso se puede decir sin lugar a dudas que las bacterias que se encuentran en las especias son, en la mayoría de los casos, la causa principal del deterioro de las latas y embutidos.
Las temperaturas más altas utilizadas en la industria avícola son de 60 a 80 °C para la pasteurización y hasta 120 °C para la esterilización.
Para que se produzca la síntesis de aflatoxina u otra micotoxina, es necesario coordinar varios factores: humedad, temperatura, sustrato, etc.