Homenaje proveniente del término en francés: hommage,→ en francés: homme,→ en latín: homo, "humano", →vía latín medio homagium; es decir "homenaje" del vasallo, "homo", hacia el señor feudal, "dominus".
[2] Es una palabra que conecta con el término enprovenzal homenatge, basado del latín Hominomaticum .
[10] Etimológicamente proviene del provenzal homenatge,[11] en francés hommage (término con el que se utiliza en la mayor parte de los textos, pues es una institución que se extendió especialmente en ese ámbito lingüístico)[12] y latinizado como homagium.
Recibía diferentes denominaciones debidas a las partes que comprendía: encomendación, investidura, humillación o arrodillamiento -véase proskynesis-, espaldarazo, osculum, inmixtio manuum.
En cualquier disputa legal que pudiera surgir, la iglesia podía actuar como un testigo confiable, porque en general se la consideraba una institución digna de confianza.