Este hecho propició que la organización Hispania Nostra la incluyera en su Lista roja de patrimonio en peligro para tratar de preservar el patrimonio industrial que representa la central.
Se construyó un poblado junto a las instalaciones, como viviendas para los ingenieros y técnicos norteamericanos llegados para su montaje, y una pequeña presa en el Carrión para la toma de agua de refrigeración, denominada Presa de Villalba.
También se añadió un ramal del Ferrocarril de La Robla desde Guardo, que deposita el carbón directamente en la central.
En 1984, Iberduero compró a Electra de Viesgo su participación en la central.
[20] El carbón llegaba al parque de almacenamiento en ferrocarril o en camión.
Por su parte el Grupo 2 enviaba su energía a Molledo, La Robla, Herrera de Pisuerga y Lada.