Cataratas del Iguazú

Están formadas por 275 saltos; el 80 % de ellos se ubican del lado argentino.

[3]​ El nombre de las cataratas en español, Iguazú y arcaicamente Yguazú, proviene de dos palabras de origen guaraní: la palabra «y» (que se lee [ɨ]) como vocal cerrada central no redondeada y la palabra «guazú», que en esa lengua quieren decir y= 'agua', guazú= 'grande'; es decir, Iguazú significa “agua grande”.

Entre los expedicionarios se encontraba también Jordan Hummell, que años más tarde organizó el primer viaje de turismo a las cataratas del Iguazú.

En 1888, Gregorio Lezama vendió las «tierras del Iguazú» a Martín Erracaborde Cía.

Para entonces, Jordan Hummell, acompañado de los señores Núñez y Gibaja, ya había realizado una nueva incursión hasta las cataratas del Iguazú, pero por el lado brasileño, ya que del lado argentino la selva era impenetrable.

En una de esas ocasiones un valiente guaraní raptó a la doncella elegida, para salvarla del tradicional rito, escapando con ella en canoa por el río.

Dentro del parque argentino se encuentra el Hotel Sheraton Iguazú (antes hotel Internacional Iguazú), que cuenta con una vista panorámica de la Garganta del Diablo y de los saltos brasileños.

Comenzando la visita en el salto Lanusse y pasando por el salto Álvar Núñez Cabeza de Vaca, se llega a un espléndido punto panorámico desde donde tendrá una primera vista de la Garganta del Diablo.

Avanzando un poco más se observa la isla San Martín y a su derecha el salto homónimo.

El punto de observación desde un nivel más alto cambia por completo la visión del paisaje.

A partir de allí se realiza una caminata por la nueva pasarela, que serpenteando entre las islas, recorre 1100 metros hasta los amplios balcones ubicados junto al borde y frente de la Garganta del Diablo.

En la actualidad, no sé permite el acceso a la Isla San Martín.

Este sendero permite acceder a una cascada de 20 m en plena selva.

Las Cataratas de Iguazú se hallan dispuestas en forma que parece una gran "J" inversa.

[7]​ En efecto, del lado argentino el visitante se mueve entre los saltos, no solo en las pasarelas que permiten casi tocar el agua, sino también en los paseos en lancha, que permiten ir hasta al lado de las impactantes caídas de agua, e incluso acercarse a la Garganta del Diablo, si se parte en lancha desde territorio argentino.

Fotografía histórica del Salto Tres Mosqueteros (foto de la primera mitad del siglo XX ).
Algunos de los saltos del lado argentino.
Vista de las cataratas del Iguazú desde el mirador que se encuentra en el circuito inferior.
Cataratas del Iguazú del lado argentino desde el Paseo Superior.
Las cataratas del Iguazú vistas desde el lado brasileño hacia la Garganta del Diablo.
Vista de las cataratas del Iguazú, en el centro la garganta del Diablo
Video Clip : Vista panorámica de las cataratas del Iguazú.
Cataratas del Iguazú.
Vista aérea de las cataratas del Iguazú.