Nieto de Carlos Belli Core, italiano que arribó al Perú en 1878 y se consagró a la arqueología.
Dedicó un año entero en visitar otras ciudades españolas, para luego pasar a Roma, donde radicó durante dos meses.
En 1959 contrajo matrimonio con Carmela Benavente-Alcázar Suárez, unión de la que nacieron dos hijas: Pilar y Mariella.
En 1962 fue laureado con el Premio Nacional de Poesía en mérito a su poemario ¡Oh hada cibernética!
[4] En 1967 empezó su carrera docente, dictando cursillos de literatura contemporánea en su alma mater.
[5] En 1980 fue incorporado a la Academia Peruana de la Lengua, ocasión en la que pronunció su discurso “Eguren, el recóndito”.
[4] En 1989 participó en la reunión “D’Annunzio y los poetas de hoy”, realizada en Pescara, Italia.
[7] Belli ha dicho que con su poesía en realidad no pretende "ex profeso nada".
«No hay en mí un acto deliberado cuando descubro una veta, una zona, una línea a seguir.