[1][2] Tenían presencia en las fronteras terrestres, provincias marítimas y en Madrid.[3] Carlos III promulgó nuevas ordenanzas en 1770, en las que se recogían entre las misiones encomendadas auxiliar a los ministros de Rentas Reales en la persecución del contrabando, así como en cualquier otra malversación a la Real Hacienda.Aproximadamente un tercio se puso al lado de los sublevados —entre 5000 y 6000 hombres— y dos terceras partes se mantuvieron fieles a la República —unos 10 000 efectivos—.En el transcurso de la guerra, en la zona republicana aumentaron los efectivos.[10] Hubo unidades del incipiente Ejército Popular, cuyos efectivos llegaron a estar compuestos enteramente por carabineros, como las Brigadas Mixtas 8.ª, 85.ª, 87.ª, 152.ª 179.ª, 211.ª, 222.ª y 228.ª.