[1] Byakko tiene la apariencia de un tigre blanco, haciendo referencia al oeste y simboliza, también, el elemento rayo o aire.
El origen de Byakko en Japón se ve influenciado por la mitología china, al igual que las otras tres criaturas divinas.
[5] Al igual que con los otros tres Símbolos, hay siete "Mansiones" astrológicas (posiciones de la Luna) dentro del Tigre Blanco.
[10][11] Se dice que el tigre blanco solo aparecía, ocasionalmente, si el emperador legislaba con absoluta virtud o si había paz en el mundo.
En la novela se hace referencia al monje como Tang Sanzang, en algunas traducciones del libro, su título aparece como Tripitaka, que es el término sánscrito original para el Sanzangjing.
Las mujeres sin vello púbico eran consideradas contaminadas con espíritus malignos y un símbolo de mala suerte, por lo que se las llamaba tigres blancos.
La imagen de Bái Hǔ podría representar la energía sexual primigenia e indómita que, mediante la disciplina, puede elevarse a algo más refinado o espiritual.
Esta visión podría vincular al tigre con lo erótico y lo sexual en un sentido metafórico de despertar o transformación a través del deseo.