La carretera unía las capitales sasánidas Istajr (muy cerca de la antigua Persépolis) y Ctesifonte.
También en la ciudad, especialmente en los interiores, se pueden ver trabajos de azulejos adaptados del arte romano.
Sin embargo, no era un asentamiento completamente nuevo: los arqueólogos han encontrado restos de las edades parta y elamita.
La arqueóloga británica Georgina Herrmann también escribió un libro sobre los relieves rupestres de Sasán en Bishapur que se publicó en 1980.
En el centro hay un espacio en forma de cruz con ocho grandes exedras cuadradas decoradas con 64 nichos.
Los excavadores franceses creían que se había cubierto con un techo abovedado, pero esta reconstrucción ha sido rechazada.